LeoLabs, una compañía de rastreo de objetos espaciales con sede en California, ha presentado Scout, un sistema de radar de vigilancia móvil dirigido a clientes militares. Este sistema está diseñado para mejorar el monitoreo de la órbita terrestre baja (LEO), particularmente relevante dada la creciente preocupación del Pentágono con respecto a las actividades espaciales de China.
Presentado el 7 de abril, Scout es una versión portátil de la infraestructura de radar de sitio fijo existente de LeoLabs. Su portabilidad, facilitada por un camión del tamaño de un contenedor, permite un rápido reposicionamiento a ubicaciones estratégicas, como explicó el CEO de LeoLabs, Tony Frazier, en una entrevista reciente. Desarrollado con fondos de un contrato de Investigación de Innovación para Pequeñas Empresas, Scout está destinado a abordar las brechas dentro de la red de vigilancia espacial del ejército de EE. UU. "También estamos explorando formas en que se pueda desplegar en una plataforma marítima", declaró Frazier. "Scout se puede colocar en cualquier lugar para abordar contingencias o monitorear regiones específicas de la órbita terrestre baja que requieren una vigilancia mejorada."
Este radar móvil representa un movimiento estratégico significativo por parte de LeoLabs para expandir sus operaciones de defensa en medio de los crecientes esfuerzos de EE. UU. para monitorear las actividades espaciales chinas y rusas. En diciembre, la compañía lanzó un sitio de radar UHF en Arizona para rastrear objetos en órbita terrestre baja y muy baja, incluidas amenazas de misiles avanzados y vehículos de planeo hipersónicos. Además, LeoLabs aseguró un acuerdo público-privado de $60 millones, respaldado por el programa de Investigación de Innovación para Pequeñas Empresas y el Comando Espacial de EE. UU., para desplegar un sitio de radar UHF en la región del Indo-Pacífico para 2026.
LeoLabs está integrando estos nuevos sensores con su red de radar de matriz en fase global existente en Australia, las Azores, Costa Rica, Nueva Zelanda y Texas. Frazier destacó que esta expansión está impulsada por la creciente demanda de capacidades de vigilancia debido al aumento de las mega constelaciones en la órbita terrestre baja y la necesidad de tecnologías militares para monitorear naves espaciales sofisticadas. "Estamos viendo naves espaciales que están maniobrando agresivamente, y para poder detectar esa actividad y mantener la custodia de esos objetos, estamos proliferando nuestros sensores", explicó Frazier. El sistema de radar móvil también refuerza las capacidades de defensa antimisiles, aumentando su atractivo para los clientes militares. Actualmente, LeoLabs está probando la capacidad de sus sensores para rastrear vehículos de planeo hipersónicos, notoriamente difíciles de detectar e interceptar debido a su velocidad y maniobrabilidad.