Un Falcon 9 lanzó con éxito una nave espacial de carga Cygnus mejorada, NG-23, a la Estación Espacial Internacional el 14 de septiembre. Despegando desde Cabo Cañaveral, la NG-23 Cygnus, la primera de la variante más grande Cygnus XL, se separó de la etapa superior del cohete aproximadamente 14 minutos y medio después. Se espera que llegue a la ISS el 17 de septiembre.
Cygnus XL cuenta con un aumento de 1,6 metros en la longitud de su módulo de carga en comparación con las versiones anteriores, lo que resulta en un aumento de un tercio de su capacidad de carga, alcanzando ahora los 5.000 kilogramos. Si bien la NASA no reveló el desglose preciso de la carga antes del lanzamiento, el aumento de tamaño requirió un análisis de sus efectos en los sistemas de la ISS, incluidos los sistemas de soporte vital y control térmico, según Dina Contella, subdirectora del programa ISS de la NASA. También se evaluaron los cambios operativos para el brazo robótico Canadarm2, responsable del atraque de Cygnus.
Está previsto que Cygnus permanezca en la estación hasta la próxima primavera, pero se planea un desacoplamiento temporal en noviembre para evitar interferencias con el acoplamiento de la Soyuz MS-28. "Solo para estar seguros, estamos tratando de mantener libre el puerto vecino", explicó Contella. El brazo robótico reposicionará Cygnus si es necesario; de lo contrario, partirá antes de que llegue la Soyuz.
NG-23 sigue a NG-21 en agosto de 2024, y marca una recuperación significativa después del retraso indefinido de NG-22 a principios de este año debido a daños en su módulo de carga presurizado durante el envío marítimo. "Fue una situación muy desafortunada", comentó Ryan Tintner, vicepresidente de sistemas espaciales civiles de Northrop Grumman, atribuyendo el daño a un accidente marítimo. Los detalles sobre el alcance del daño y las reparaciones siguen sin revelarse, y Tintner afirma que "aún está en proceso" con el proveedor, Thales Alenia Space en Italia. A pesar de esto, confirmó que "NG-22 volará", y el momento del lanzamiento aún se determinará en colaboración con la NASA.
Este lanzamiento fue la tercera misión Cygnus que utilizó un Falcon 9, después de NG-20 en enero de 2024 y NG-21 en agosto de 2024. La dependencia anterior de Northrop Grumman de su cohete Antares (con tres lanzamientos en cohetes Atlas 5 después de un fallo de Antares en 2014) terminó en 2023 debido al uso de una primera etapa de fabricación ucraniana con motores rusos. Su asociación con Firefly Aerospace para el Antares 330, que se espera que esté listo en 2026, explica la dependencia actual del Falcon 9. "Estamos haciendo grandes progresos en el Antares 330 y eso se está preparando para ser utilizado en algún momento, estar listo para funcionar, en 2026", dijo Tintner, y agregó que NG-24 también se lanzará en un Falcon 9 el próximo año.