Un instituto chino ha concluido recientemente las evaluaciones terrestres de lo que han denominado una plataforma de fabricación reconfigurable flexible en órbita, con el objetivo de permitir la fabricación espacial a gran escala y rentable en el futuro. Según el desarrollador del módulo, las pruebas en un "módulo central" representan un gran paso adelante en la combinación de estructuras rígidas con módulos flexibles, confirmando tecnologías vitales como el sellado de conexión rígida-flexible, el inflado rápido y el despliegue preciso, y representan un progreso en el área de la fabricación inteligente.
El proyecto de la plataforma de fabricación reconfigurable flexible en órbita está siendo liderado por el Instituto de Mecánica de la Academia China de Ciencias (IMCAS), que publicó detalles sobre las pruebas en un comunicado el 3 de noviembre. El Instituto de Química Aplicada de Changchun, el Instituto de Automatización de Shenyang y el Instituto de Física Técnica de Shanghái también están contribuyendo al proyecto. Las imágenes proporcionadas sugieren que la plataforma flexible tiene un diámetro de unos 2 metros. IMCAS la describe como que tiene un "esqueleto de acero" y una "piel de fibra de alta tecnología". Además, utiliza materiales compuestos ultra flexibles de una manera innovadora, lo que significa que "se pliega firmemente durante el lanzamiento, lo que resulta en un tamaño compacto. Después de entrar en órbita, se infla y se despliega, formando un espacio de trabajo grande y estable".
China ya ha establecido una presencia humana en la órbita terrestre baja (LEO) con la construcción de su estación espacial Tiangong entre 2021 y 2022. La estación consta de tres módulos rígidos lanzados utilizando el cohete Long March 5B. La tripulación más reciente de tres personas llegó al puesto de avanzada el 31 de octubre.
Sin embargo, la declaración de IMCAS señala que las plataformas tradicionales en órbita están limitadas por la capacidad de las cofias de lanzamiento, son costosas y difíciles de expandir en órbita, lo que dificulta la realización de operaciones de fabricación multifuncionales a gran escala. La declaración también parece insinuar la inclusión de cargas útiles robóticas e industriales. "Esta tecnología impulsará la fabricación espacial desde la 'prueba de concepto' hasta la 'realización de ingeniería'", dijo el líder del proyecto, Yang Yiqiang. "En el futuro, podremos fabricar y producir directamente en el entorno espacial, logrando verdaderamente el desarrollo y la utilización independientes de los recursos espaciales".
Según la declaración, el avance de las tecnologías inflables o reconfigurables, así como las tecnologías relacionadas, abrirá nuevas oportunidades en campos como la biomedicina espacial, la investigación y el desarrollo de materiales especiales, el mantenimiento en órbita, la impresión 3D y proporcionará un importante apoyo tecnológico para el desarrollo de la futura infraestructura espacial. IMCAS no proporcionó información sobre varios aspectos, como la fecha de lanzamiento prevista, las órbitas objetivo, la masa de la plataforma o el volumen.
El diámetro estimado de dos metros del artículo de prueba indica que es un demostrador de tecnología en lugar de un modelo de tamaño completo, y que se requerirá un trabajo y un progreso considerables antes del vuelo. Un lanzamiento podría facilitarse en el futuro por CAS Space, una escisión comercial de CAS que está a punto de lanzar su vehículo de lanzamiento de queroseno-oxígeno líquido Lijian-2 (Kinetica-2).
Un mapa de ruta conceptual dentro de la declaración de IMCAS describe un plan para pasar de la fabricación orbital LEO utilizando módulos cilíndricos inflables a la integración en una "fábrica de microgravedad" que respalde las operaciones lunares y del espacio profundo. La representación en órbita del concepto de plataforma también parece parecerse a las primeras representaciones de Starlab. El anuncio sigue a las pruebas en órbita de un pequeño módulo expandible a bordo de la misión satelital recuperable Shijian-19, que se lanzó en septiembre de 2024. La Academia China de Tecnología Espacial (CAST), una división del principal contratista espacial de China, CASC, llevó a cabo ese experimento. CAST fue responsable de la construcción de los módulos de la estación espacial Tiangong.
El interés de China en los módulos inflables es consistente con desarrollos como la demostración BEAM de Bigelow Aerospace en la Estación Espacial Internacional. Varias empresas, incluidas Lockheed Martin y Sierra Space, están probando tecnología de hábitat inflable que podría utilizarse en estaciones espaciales comerciales en la órbita terrestre baja después de la ISS. La medida también se alinea con un enfoque global en el servicio, ensamblaje y fabricación en órbita (OSAM). Otras iniciativas chinas relevantes en este campo incluyen patentes del Instituto de Tecnología de Harbin para una cápsula inflable y rígida para cuevas lunares, así como investigaciones sobre cabinas presurizadas expandibles y un módulo de despliegue inflable espacial. La prueba de IMCAS parece representar un paso preliminar para China hacia el logro de las capacidades de OSAM.

