La National Association of Broadcasters (NAB) ha solicitado formalmente a la Federal Communications Commission (FCC) que establezca un calendario definitivo para la discontinuación de las transmisiones ATSC 1.0. Su propuesta tiene como objetivo finalizar el cambio de la industria a NextGen TV (ATSC 3.0) dentro de los próximos seis años.

Este ambicioso plan describe un enfoque de dos fases. La primera fase apunta a una conversión completa de los 55 principales mercados televisivos —que representan aproximadamente el 70% de la población de EE. UU.— para febrero de 2028. La segunda fase abarcaría los mercados restantes para febrero de 2030. ATSC 3.0, ya operativo en áreas que cubren aproximadamente el 76% del país, ofrece una calidad de video y audio superior, funciones interactivas y nuevas capacidades prometedoras de transmisión de datos con un importante potencial de ingresos.

“Creo que la FCC va a ser extremadamente pro-innovación y dará a los radiodifusores la flexibilidad para lanzar en más mercados”, declaró Rob Folliard, vicepresidente sénior de relaciones gubernamentales y distribución de Gray Television, en una entrevista reciente. “Realmente tiene que haber una fecha límite definitiva… Esto es importante para la industria. Así es como la televisión por difusión sobrevive a la próxima década.”

La NAB sostiene que una transición integral liberaría un espectro valioso, allanando el camino para servicios avanzados, incluido un Sistema de Posicionamiento de Transmisión terrestre (BPS) que podría servir como una copia de seguridad crucial del GPS. Más allá del calendario, la NAB insta a la FCC a modernizar las regulaciones para que se alineen con el nuevo estándar. Esto incluye exigir sintonizadores ATSC 3.0 en todos los televisores nuevos para febrero de 2028 y ajustar las reglas de transmisión obligatoria de la televisión por cable para abordar las distinciones técnicas entre los dos estándares.

El presidente y director ejecutivo de NAB, Curtis LeGeyt, destacó la necesidad urgente de una acción regulatoria para evitar retrasos: “Next Gen TV ya está transformando la experiencia de visualización, ofreciendo una calidad de imagen superior, audio inmersivo, funciones interactivas, programación hiperlocalizada y capacidades de seguridad pública de vanguardia, todo mientras mantiene la televisión local gratuita y accesible”, declaró. “Los radiodifusores han invertido significativamente en esta transición, pero las regulaciones obsoletas amenazan con detener el progreso.”

La petición enfatiza el importante respaldo de la industria para la transición, señalando que las compras de los consumidores superan los 14 millones de televisores compatibles con ATSC 3.0. Además, la Iniciativa del Futuro de la Televisión, un esfuerzo de colaboración para abordar los desafíos de la transición, también ha publicado un informe que apoya un cambio estructurado al nuevo estándar. El comisionado de la FCC, Brendan Carr, ha expresado previamente su apoyo, describiendo la situación como un “momento de romper el cristal” que exige una acción decisiva. La petición de la NAB refleja este sentido de urgencia, advirtiendo que sin una acción rápida, la transición podría detenerse.

Es probable que la propuesta de la NAB provoque un debate, especialmente en lo que respecta a los mandatos para los fabricantes de televisores y las posibles consecuencias para los proveedores de cable y satélite. Si bien la asociación cree que las actualizaciones regulatorias facilitarán una transición sin problemas, la posible oposición de grupos como la Consumer Technology Association y los proveedores de televisión de pago podría complicar el proceso. La respuesta de la FCC a la petición será fundamental para configurar el futuro de la televisión por difusión.