Tras un discurso en la Conferencia Espacial Comercial el 12 de febrero, la administradora interina de la NASA, Janet Petro, abordó la revisión en curso de los pagos de la agencia por parte del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). La implementación de DOGE, encabezada por Elon Musk, ha causado controversia debido a informes de personal que accede a sistemas críticos sin las autorizaciones adecuadas.

Petro confirmó que DOGE planea examinar los pagos de la NASA, afirmando: “Vamos a dejar que DOGE venga. Van a mirar, de manera similar a lo que han hecho en otras agencias, nuestros pagos y a dónde se ha ido el dinero”. Sin embargo, no especificó el enfoque de esta revisión. Se han planteado preocupaciones sobre posibles conflictos de interés que involucran a Elon Musk y SpaceX, un importante contratista de la NASA. Las representantes Zoe Lofgren y Valerie Foushee enviaron una carta expresando estas preocupaciones. Petro aseguró que la NASA tiene "políticas de conflicto de interés muy estrictas" para abordar estos problemas.

Además, Petro abordó el impacto del memorando de compra de “Fork in the Road”, afirmando que “cientos” de empleados de la NASA aceptaron la compra, al tiempo que reconoció la incertidumbre que rodea el futuro de la campaña de exploración lunar Artemis. Aclaró que no ha presionado a la Casa Blanca para que mantenga las misiones actuales Artemis 2 y 3, enfatizando que “Estamos ejecutando nuestros programas registrados, que incluyen Artemis 2 y 3 y más allá”. La confirmación del recién nominado administrador de la NASA, Jared Isaacman, sigue pendiente, y el senador Ted Cruz declaró que el Comité de Comercio del Senado espera la finalización de la documentación necesaria.

El anuncio de Boeing sobre posibles despidos de empleados que trabajan en el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS) debido a "revisiones del programa Artemis" añade más complejidad a la situación.