Rubicon Space Systems ha entregado con éxito el sistema de propulsión para la misión de demostración tecnológica Green Propulsion Dual Mode (GPDM) de la NASA, cuyo lanzamiento está previsto para octubre. Esta misión mostrará tanto la propulsión multimodo —que integra propulsores químicos y eléctricos— como ASCENT, el propelente ecológico desarrollado por el Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea de los EE. UU.

La misión GPDM representa un paso significativo hacia adelante, ya que marca el primer sistema combinado de propulsión química y eléctrica desplegado en el espacio y una prueba fundamental de las capacidades de ASCENT. Como Daniel Cavender, director de Rubicon (una división de Plasma Processes), dijo a SpaceNews: "Será el primer sistema combinado de propulsión química y eléctrica en el espacio y una prueba clave de ASCENT."

La NASA está evaluando ASCENT (Advanced Spacecraft Energetic Non-Toxic) debido a su promesa de un aumento del 50 por ciento en la densidad de impulso específico sobre la hidracina, junto con un manejo más fácil en tierra, como se detalla en una sesión informativa del Centro de Vuelo Espacial Marshall de la NASA sobre GPDM.

El módulo de propulsión química ASCENT de Rubicon, denominado Sprite, está integrado con propulsores de electrospray del Instituto Tecnológico de Massachusetts. Estos cuatro propulsores de electrospray, entregados a la NASA en septiembre, comparten el tanque de propelente, las válvulas de control y el sistema de alimentación de Sprite. El sistema está integrado en un cubesat de seis unidades.

Los ingenieros involucrados aprendieron de los desafíos que enfrentó el cubesat Lunar Flashlight de la NASA, que no logró alcanzar la órbita lunar en 2023 debido a la obstrucción de la línea de propelente. Para evitar problemas similares, Rubicon empleó tomografías computarizadas para asegurar que las líneas de propelente de Sprite estuvieran libres de desechos y realizó una prueba de fuego. Cavender señaló: “Ciertamente hemos hecho nuestra diligencia debida para abordar la preocupación por los desechos de objetos extraños [foreign object debris, FOD] del Lunar Flashlight.”

Esta entrega es un logro crucial para Rubicon, con sede en Huntsville, Alabama. Cavender destacó: “Esta es la primera vez que producimos un sistema de propulsión integrado. Hemos pasado de ser un fabricante de componentes a un fabricante de productos integrados y funcionales.”

La experiencia de Cavender con ASCENT se remonta a la Misión de Demostración Tecnológica de la NASA durante la Misión de Infusión de Propelentes Ecológicos (2019), donde también se desempeñó como gerente de proyecto Lunar Flashlight de la NASA Marshall. Él enfatiza el "gran atractivo" de ASCENT: su densidad de impulso específico. Explicó: “Para una nave espacial pequeña con limitaciones de volumen, se necesita una mayor eficiencia para ganar capacidad.”

ASCENT también ofrece ventajas de seguridad significativas sobre la hidracina. Cavender afirmó: “puede repostar en su fábrica, puede repostar en ruta, puede repostar en el vehículo de lanzamiento.”

El Departamento de Defensa también muestra un interés considerable en los propulsores de electrospray, como lo demuestra la solicitud de propuestas de octubre de la Unidad de Innovación en Defensa para desarrollar aún más esta tecnología, que genera empuje acelerando partículas cargadas.