Una decisión histórica del Ejército de EE. UU. ha llevado a la creación de su primer campo profesional espacial dedicado al personal alistado. Este cambio significativo, según afirman los oficiales militares, equipará mejor a la fuerza para los conflictos contemporáneos que abarcan los dominios terrestre, marítimo, aéreo, cibernético y espacial.
La nueva especialidad ocupacional militar (MOS), 40D para Especialista en Operaciones Espaciales, establece una trayectoria profesional permanente para los soldados alistados que se especializan en operaciones espaciales. Como anunció el 2 de mayo un alto oficial del Ejército, el Teniente General Sean Gainey, comandante del Comando de Defensa Espacial y de Misiles del Ejército de EE. UU., declaró: “Estos especialistas se convertirán en los expertos a los que recurriremos durante el próximo conflicto.”
Esta iniciativa, inicialmente presentada el pasado agosto, ha recibido ahora la aprobación formal de los altos mandos del Ejército. Antes de esto, solo los oficiales del Ejército tenían una trayectoria profesional dedicada a las operaciones espaciales. El personal alistado en funciones relacionadas con el espacio procedía anteriormente de otras especialidades —ingeniería, defensa aérea, señales o inteligencia— volviendo a menudo a sus campos originales después de completar las asignaciones espaciales.
El Teniente General Gainey hizo hincapié en la necesidad de este cambio, diciendo: “Hasta la fecha, la mayor parte de la experiencia y los conocimientos en operaciones espaciales residen en el cuerpo de oficiales en lugar del cuerpo de suboficiales. Este nuevo MOS de operaciones espaciales garantizará que los especialistas, a través de los sargentos mayores de comando, lleguen a las formaciones espaciales del Ejército con experiencia y conocimientos en operaciones espaciales.”
La decisión refleja el creciente reconocimiento militar del espacio como un dominio disputado vital para la guerra moderna. Los profesionales espaciales del Ejército se concentrarán en tácticas para interrumpir o contrarrestar las redes de satélites de los adversarios. Los oficiales del Ejército han confirmado que la iniciativa pretende ser neutral en cuanto al presupuesto. El personal previamente “prestado” a las unidades espaciales volverá a sus funciones originales, pero esos puestos se convertirán en la nueva especialidad de operaciones espaciales.
Esta medida se alinea con las estrategias más amplias del Departamento de Defensa para reforzar las capacidades espaciales en respuesta a los progresos de China en las tecnologías antisatélite. Los analistas militares señalan que, a medida que las comunicaciones por satélite, la navegación GPS y la inteligencia basada en el espacio se vuelven cada vez más críticas para las operaciones terrestres, la inversión del Ejército en personal espacial dedicado significa la creciente interdependencia entre la guerra terrestre tradicional y las capacidades avanzadas en dominios más nuevos.