En 2025, las emisoras se están centrando intensamente en la eficiencia operativa debido a un panorama mediático fragmentado y a las presiones económicas. Esto va más allá de los simples recortes de costes; implica la modernización de los flujos de trabajo, la optimización de la entrega de contenido y la optimización de la asignación de recursos. La competencia de las plataformas digitales y los servicios de streaming aumenta la presión para lograr más con menos.

Los expertos del sector destacaron la automatización, las tecnologías en la nube y la inteligencia artificial como cruciales para lograr ganancias de eficiencia en la producción y la distribución. Esto afecta a todos los aspectos de las operaciones de radiodifusión, desde los estudios y la producción remota hasta la gestión y la distribución de contenidos. Es necesario encontrar un equilibrio entre la reducción de costes inmediata y las inversiones estratégicas en tecnología para lograr mejoras a largo plazo.

“Con la fuerte competencia de una gama cada vez mayor de plataformas de streaming y digitales, y con los espectadores más jóvenes que optan por consumir contenido fuera de los medios de comunicación tradicionales, las emisoras deben actuar con rapidez para seguir siendo relevantes”, señaló Bea Alonso, directora de marketing estratégico de Projective. El objetivo no es solo reducir costes, sino lograr mejoras medibles manteniendo la calidad y ampliando la distribución.

“Es probable que las emisoras prioricen la eficiencia operativa para racionalizar los costes y mantener la competitividad. Los proveedores de televisión de pago se centrarán en salvaguardar sus ingresos publicitarios, mientras que las plataformas FAST trabajarán para aumentar sus ingresos publicitarios. Una gran parte se centrará en reducir la rotación mejorando la participación del usuario y reteniendo a las audiencias de forma más eficaz”, explicó Peter Docherty, director de tecnología y fundador de ThinkAnalytics.

El cambio a sistemas basados en IP desde la infraestructura de radiodifusión tradicional es un cambio operativo importante. Si bien promete ganancias de eficiencia, requiere una planificación e inversión cuidadosas. “La transición de la ingeniería de radiodifusión tradicional a los sistemas basados en TI representa quizás el mayor cambio cultural y técnico que ha experimentado nuestro sector. Será crucial formar a los ingenieros de radiodifusión para que se sientan cómodos con los conceptos de redes y la gestión de infraestructuras IP complejas”, enfatizó Russell Johnson, director de Hitomi Broadcast.

La adopción de la nube está impulsando la eficiencia, pero las organizaciones están adoptando un enfoque mesurado. “Los modelos comerciales de los proveedores de tecnología deben estar alineados con la necesidad de operar en diferentes infraestructuras. Para algunas empresas, el CapEx puede ajustarse a sus necesidades y presupuesto corporativo, especialmente en casos con patrones de uso predecibles. Sin embargo, las operaciones que requieren patrones de difusión flexibles pueden beneficiarse del OpEx, que alinea mejor los costes con los ingresos”, dijo Neil Maycock, director de comunicación de Pebble.

La automatización es clave, especialmente en la producción y distribución de contenidos. “La automatización elimina las tareas repetitivas, acelera el procesamiento de contenidos y reduce el error humano, lo que lleva a flujos de trabajo de producción más rápidos y eficientes. Con un socio tecnológico especializado en la automatización de flujos de trabajo, las emisoras pueden automatizar funciones rutinarias como las transferencias de archivos y el etiquetado de metadatos, permitiendo que los equipos se centren en tareas creativas y estratégicas”, afirmó Sam Peterson, director de operaciones de Bitcentral.

La IA también está afectando significativamente a la eficiencia. “Las herramientas basadas en IA se están convirtiendo rápidamente en parte de los flujos de trabajo diarios, como la redacción de noticias, el recorte de vídeo y la edición de aspectos destacados, la traducción de idiomas, la generación básica de subtítulos, la detección de imágenes de cumplimiento y mucho más. Estas tecnologías crean ahorros de tiempo y eficiencias, permitiendo a las empresas de medios entregar más contenido en menos tiempo”, añadió Alonso.

La producción remota es otro aspecto crucial. “La producción remota de contenido en directo es transformadora. El envío de equipos mínimos a un evento y la transmisión de todas las fuentes a una base de producción central reducen el coste y la huella de carbono, y aumentan enormemente la utilización de la costosa tecnología de producción”, dijo Sergio Ammirata, fundador y científico jefe de SipRadius.

El cambio a operaciones remotas también ofrece beneficios medioambientales. “La producción remota y distribuida parece una respuesta de sostenibilidad lógica que simplemente tiene sentido para los negocios. Las emisoras pueden producir más contenido utilizando menos recursos mientras mantienen altos estándares de producción. Equipos más pequeños in situ, menos equipos y menos vehículos significan menos viajes y transporte, lo que a su vez conduce a menores emisiones y a una reducción de los gastos”, señaló Robert Szabo-Rowe, jefe de ingeniería y gestión de productos de Tata Comms Media.

Las restricciones presupuestarias influyen en gran medida en la adopción de la tecnología. “En un clima económico cada vez más restrictivo, las emisoras están adoptando un enfoque más estratégico hacia la adopción de la tecnología. Se espera que el enfoque para 2025 cambie de la búsqueda de la innovación por sí misma a la implementación de soluciones que proporcionen resultados claros y medibles. Para prosperar, las emisoras deben lograr una producción de alta calidad con una pila tecnológica optimizada, encontrando un equilibrio entre la gestión de los costes operativos y la inversión en soluciones sostenibles y eficaces”, reiteró Peterson.

Esta necesidad de eficiencia afecta a las necesidades y habilidades de la fuerza laboral. La gestión del cambio es un reto clave. “La gestión del cambio sigue siendo el mayor reto a la hora de adoptar nuevas soluciones tecnológicas, y es poco probable que esto cambie. Siempre es más fácil cambiar la tecnología que cambiar los hábitos de las personas. Para cualquier organización de medios que planifique actualizaciones tecnológicas significativas, una planificación cuidadosa será esencial para garantizar que los equipos hagan la transición sin problemas”, enfatizó Alonso.

Los flujos de trabajo basados en IP y las tecnologías en la nube requieren nuevos conocimientos. “La transición de la ingeniería de radiodifusión tradicional a los sistemas basados en TI representa quizás el mayor cambio cultural y técnico que ha experimentado nuestro sector. Será crucial formar a los ingenieros de radiodifusión para que se sientan cómodos con los conceptos de redes y la gestión de infraestructuras IP complejas”, repitió Johnson.

Los roles en evolución se extienden más allá de las habilidades técnicas. “Los equipos de redacción, producción y creación de contenido están ampliando ahora sus funciones para incluir funciones históricamente más de tipo de producción y técnicas. Esta estrategia de eficiencia es el resultado de que las soluciones ahora están llegando al mercado que reducen las características y funciones previamente complejas a flujos de trabajo más fáciles de usar y automatizados”, dijo Rick Young, vicepresidente senior y jefe de productos globales de LTN.

En última instancia, las emisoras deben centrarse en mejoras medibles, mantener la calidad y satisfacer las expectativas de la audiencia. La integración de tecnologías como la IA y los sistemas basados en la nube sigue remodelando las operaciones y las necesidades de la fuerza laboral. Un equilibrio entre innovación y practicidad es esencial para el éxito.