La Agencia Espacial Europea (ESA) ha inaugurado oficialmente una nueva antena de espacio profundo en New Norcia, Australia Occidental, como parte de una iniciativa más amplia para mejorar la colaboración entre Europa y Australia en el ámbito del espacio. El evento, celebrado el 4 de octubre, conmemoró la finalización de una antena de 35 metros diseñada para comunicarse con naves espaciales ubicadas en todo el sistema solar.
Esta nueva antena, la segunda en New Norcia, representa la cuarta incorporación a la red global Estrack de la ESA. Según Josef Aschbacher, director general de la ESA, "Esta inversión estratégica refuerza las capacidades de comunicación de espacio profundo de la ESA y maximiza el retorno del activo más valioso de nuestras misiones: los datos entregados por las naves espaciales que viajan lejos de la Tierra".
Denominada New Norcia 3, se espera que la antena comience a operar el próximo mes de marzo, apoyando las comunicaciones con las naves espaciales de la ESA. Sus características avanzadas incluyen tecnología de criorefrigeración para el receptor, lo que reduce el ruido y aumenta la sensibilidad. Mehran Sarkarati, jefe de la división de ingeniería de estaciones terrestres de la ESA, señaló el mes pasado que es "la antena más moderna y avanzada que tiene la ESA".
La incorporación de New Norcia 3, junto con las antenas existentes en Argentina y España, tiene como objetivo satisfacer la creciente demanda de comunicaciones espaciales. Sarkarati explicó que "Todo se está volviendo más intensivo en datos: nuestras cargas útiles e instrumentos son cada vez más avanzados y nuestras misiones están aumentando", y añadió que, a pesar de esta nueva incorporación, la capacidad seguirá siendo limitada, lo que ha impulsado una propuesta para una quinta antena de espacio profundo en Sudamérica.
La construcción de New Norcia 3 supuso una inversión de 62,3 millones de euros por parte de la ESA (73,2 millones de dólares estadounidenses). El gobierno australiano aportó 4 millones de dólares australianos (2,6 millones de dólares estadounidenses) para apoyar el desarrollo de la antena. Enrico Palermo, jefe de la Agencia Espacial Australiana, aclaró que la contribución australiana no estaba vinculada a una parte específica del proyecto, sino más bien a un apoyo general. La agencia prevé un impacto económico anual de 4,5 millones de dólares durante los 50 años de vida útil de la antena, lo que considera "un retorno económico bastante significativo, a nivel local, de la inversión de 4 millones de dólares".
El emplazamiento de New Norcia está gestionado por la agencia científica nacional de Australia, CSIRO, que también gestiona el complejo de la Red de Espacio Profundo de la NASA cerca de Canberra. Palermo hizo hincapié en que "Profundiza la reputación de Australia en comunicaciones de espacio profundo", y afirmó: "Queremos seguir siendo un socio de confianza en las misiones de exploración del mundo, y vemos que esto continúa a través de New Norcia 3".
La relación de cooperación entre Europa y Australia en el espacio se está ampliando aún más. Durante el Congreso Astronáutico Internacional de septiembre, Australia anunció sus planes de buscar un acuerdo de cooperación formal con la ESA. Esto podría conceder a Australia un estatus similar al de Canadá, permitiendo a las empresas y organizaciones australianas participar en los programas de la ESA. Aschbacher declaró que "Se están abriendo nuevas y emocionantes oportunidades entre los sectores espaciales europeo y australiano, ya que Australia anunció esta semana un mandato para iniciar las negociaciones sobre un acuerdo de cooperación con la ESA".