El 16 de octubre, la Comisión Europea reveló un plan de trabajo enfocado en monitorear el progreso y lograr capacidades de defensa críticas para los miembros de la Unión Europea para 2030. Este plan, conocido como Preservando la Paz – Hoja de Ruta de Preparación de la Defensa 2030, se basa en el Libro Blanco para la Defensa Europea – Preparación 2030 de marzo y la iniciativa más amplia ReArm Europe/Readiness 2030. El paquete ReArm Europe tiene como objetivo estimular hasta €800 mil millones ($933 mil millones) en inversión en defensa utilizando una combinación de estrategias financieras.

La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, describió la hoja de ruta como “un plan claro con objetivos compartidos e hitos concretos en nuestro camino hacia 2030”. Representa el último esfuerzo para fortalecer la autonomía militar de Europa en medio de las crecientes tensiones con Rusia y la inestabilidad global. La hoja de ruta traduce las prioridades establecidas en el libro blanco – cerrar las brechas de capacidad, centrarse en tecnologías esenciales y prepararse para posibles crisis – en hitos concretos y cuatro programas "emblemáticos" a nivel de la UE: Iniciativa Europea de Defensa contra Drones, Vigilancia del Flanco Oriental, Escudo Aéreo Europeo y Escudo Espacial Europeo.

La hoja de ruta también detalla los planes para un área militar unificada de la UE para 2027. Esto implicaría la armonización de las regulaciones y la creación de una red compartida de rutas terrestres, aéreas y marítimas para el movimiento rápido de tropas. El Comisario Europeo de Defensa, Andrius Kubilius, declaró durante la presentación que “este plan es cómo vamos a movilizarnos nosotros mismos, los estados miembros y las instituciones de la UE para cumplir. La hoja de ruta se trata de la planificación de la entrega y de la entrega de buques insignia”.

Los cuatro programas emblemáticos están diseñados como proyectos paneuropeos expansivos. Requerirán capacidades coordinadas, infraestructura, logística y una mayor coordinación de la UE para desbloquear la financiación y el apoyo. Los aspectos clave de las iniciativas incluyen:

  • Iniciativa Europea de Defensa contra Drones: Desarrollada en respuesta a los recientes incidentes con drones, esta iniciativa tiene como objetivo coordinar sistemas interoperables contra drones para la detección, el seguimiento y la neutralización, en consonancia con las operaciones de la NATO. Se espera una capacidad inicial para finales de 2026, con plena funcionalidad en 2027.
  • Vigilancia del Flanco Oriental: Esto implica una presencia multicapa terrestre, aérea y marítima a lo largo de la frontera oriental de la UE, integrando defensas aéreas y contra drones con sistemas terrestres, seguridad marítima en los mares Báltico y Negro, y una mayor conciencia situacional. La capacidad inicial está prevista para finales de 2026, con plena funcionalidad para finales de 2028.
  • Escudo Aéreo Europeo: Una capa integrada de defensa aérea y antimisiles, diseñada para ser interoperable con la NATO. El lanzamiento está programado para comenzar en el segundo trimestre de 2026.
  • Escudo Espacial Europeo: Centrado en la protección de los activos y servicios espaciales, integrándose con Galileo, IRIS² y otros sistemas de doble uso. Se hará hincapié en el conocimiento del dominio espacial, la lucha contra las interferencias y las operaciones en el espacio. El lanzamiento está previsto para el segundo trimestre de 2026.

La financiación para ReArm Europe/Readiness 2030 se logrará mediante la incorporación del gasto nacional, un instrumento de préstamo propuesto (SAFE, Security Action for Europe) y la movilización de capital privado a través de la Unión de Ahorros e Inversiones y el Banco Europeo de Inversiones (EIB). Kubilius enfatizó la importancia de la hoja de ruta, afirmando: “La implementación de la hoja de ruta está dando una tarea y un mandato muy pesados a la Comisión, a las instituciones de la UE y a los Estados miembros. Esto exigirá enormes esfuerzos de nuestra parte para cumplir”.