El próximo año, una empresa emergente con sede en Berlín planea crear la primera red LTE en la Luna como parte del primer vuelo privado al satélite de la Tierra.

En el futuro, todos los automóviles estarán conectados por una sola red de radio LTE-V común; un sistema similar también está planeado para la Luna. "Queremos demostrar que LTE puede funcionar en la Luna", dijo Robert Beme, director de la empresa emergente con sede en Berlín Part-Time-Scientists, que se está preparando para aterrizar el primer módulo privado en la Luna. El vehículo de lanzamiento Falcon está programado para lanzarse desde Cabo Cañaveral en 2018.

El módulo de aterrizaje Alina y dos rovers lunares, desarrollados por Audi, estarán equipados con equipos de radio, que se están creando con la participación del gigante de las telecomunicaciones Vodafone. Además de la comunicación entre los rovers, el sistema permitirá la transmisión continua de información e imágenes a la Tierra.

En comparación con los estándares de comunicación convencionales, el funcionamiento del sistema LTE y la transmisión de datos requieren una cantidad de energía insignificante. Cada rover podrá utilizar aproximadamente 80 vatios de energía para su funcionamiento. Los medios de comunicación tradicionales consumirían 60 vatios. Gracias al uso de LTE, la comunicación y el envío de imágenes requerirán poco más de 1 vatio.

El módulo de aterrizaje Alina y los rovers lunares podrán intercambiar información a distancias de 12 a 15 kilómetros. La expedición durará aproximadamente dos semanas.