El Comando de Sistemas Espaciales de EE. UU. (SSC) está buscando propuestas para la próxima generación de satélites de advertencia y seguimiento de misiles, conocidos como Época 2 (E2). Este programa, que utilizará vehículos espaciales de órbita terrestre media (MEO), tiene como objetivo desarrollar un sofisticado sistema de seguimiento global capaz de detectar y monitorear misiles hipersónicos y balísticos avanzados. El anuncio de este programa señala un avance significativo en las capacidades de defensa espacial de EE. UU.
El objetivo del SSC es crear un sistema que pueda contrarrestar eficazmente las amenazas emergentes planteadas por los sistemas de armas avanzados. Esta red de satélites E2 se integrará con una empresa más amplia, que abarca varios componentes como el Centro de Planificación de Infrarrojos Persistentes Conjuntos. Esta integración facilitará la distribución eficiente de las tareas y la posterior recopilación y entrega de datos cruciales de seguimiento de misiles a las entidades relevantes.
Según el SSC, se otorgarán hasta dos contratos de precio fijo firme para el programa E2. Estos contratos cubrirán la fase de creación de prototipos, que se espera que culmine en el desarrollo e implementación del nuevo sistema de seguimiento global. Las empresas seleccionadas desempeñarán un papel vital en la mejora de la capacidad de EE. UU. para anticipar y responder a posibles amenazas de misiles.
El SSC ha programado sesiones informativas de la industria durante los próximos 10 días para proporcionar información más detallada sobre el programa E2 y los requisitos para los posibles postores. La fecha límite para la presentación de ofertas es el 11 de octubre de 2023, y se espera que las decisiones de adjudicación se tomen alrededor de marzo de 2025.
Este programa se basa en los éxitos de la iniciativa Época 1, que vio la adjudicación de contratos a la unidad de negocio Millennium Space Systems de Boeing y RTX. Los satélites desarrollados bajo Época 1 están programados para ser lanzados a finales de 2026, contribuyendo significativamente a la red de advertencia de misiles existente de EE. UU.