El crecimiento explosivo del streaming de vídeo exige una entrega de contenido eficiente y de alta calidad. Las empresas de medios aprovechan la inteligencia artificial (IA) y la Codificación Adaptativa de Contenido (CAE) para optimizar el ancho de banda, reducir los costes y mejorar la experiencia del espectador. La CAE ajusta dinámicamente los parámetros de codificación en función de la complejidad del vídeo, mejorando la eficiencia del streaming.
Entre 2015 y 2018, Netflix fue pionera en CAE, logrando una reducción de la tasa de bits superior al 30% sin pérdida de calidad (medida por VMAF). A diferencia de la compresión uniforme, la CAE optimiza dinámicamente la configuración para cada segmento. Las escenas más sencillas reciben tasas de bits más bajas, mientras que las escenas complejas reciben tasas de bits más altas para mantener la calidad. La CAE inicial era computacionalmente costosa, pero los avances en las soluciones heurísticas y los métodos basados en IA ofrecen resultados casi óptimos con menores costes, permitiendo la transmisión en vivo.
Los frameworks de codificación basados en el aprendizaje automático refinan aún más la CAE, permitiendo la optimización de parámetros en tiempo real. La IA predice la configuración (tasa de bits, CRF, VBV) analizando la complejidad fotograma a fotograma. VisualOn Optimizer, un framework de CAE basado en aprendizaje automático, utiliza la extracción de características espaciales y temporales para clasificar los segmentos de vídeo y determinar los parámetros de codificación eficientes. La retroalimentación en tiempo real garantiza una calidad y una tasa de bits óptimas.
Plataformas como Netflix, YouTube y Amazon Prime Video utilizan la CAE y la codificación basada en IA. Un estudio de Netflix muestra que la codificación basada en IA reduce el uso de datos entre un 20% y un 30% sin pérdida de calidad. Los códecs mejorados con IA de Google reducen el ancho de banda hasta en un 30%. Para la transmisión en vivo, la IA se adapta dinámicamente a las condiciones de la red, reduciendo las tasas de rebuffering hasta en un 50%.
La Codificación Adaptativa de Contenido basada en IA está revolucionando la entrega de vídeo. Reduce el ancho de banda, disminuye los costes, mejora la escalabilidad (especialmente para eventos en vivo) y aumenta la satisfacción del espectador. El desarrollo continuo de la codificación de una sola pasada basada en IA y los frameworks adaptativos en tiempo real perfeccionarán aún más la eficiencia del streaming, garantizando un vídeo de alta calidad en todo el mundo.