Un juez federal en la ciudad de Nueva York otorgó una orden de restricción temporal el viernes, deteniendo los esfuerzos de la administración Trump para cerrar Voice of America (VOA). Varios periodistas de VOA iniciaron la demanda, argumentando que las acciones de la administración eran ilegales e inconstitucionales.
El Juez del Tribunal de Distrito de los EE. UU. J. Paul Oetken emitió la orden de restricción temporal, previniendo nuevos intentos de terminar las operaciones de VOA. Esta orden permanece en efecto por un período de hasta 21 días. Andrew G. Celli Jr., representando a los periodistas de VOA, declaró: “Esta es una victoria decisiva para la libertad de prensa y la Primera Enmienda, y una fuerte reprimenda a una Administración que ha mostrado una total falta de respeto por los principios que definen nuestra democracia.”
La demanda de los demandantes enfatizó las consecuencias potenciales de silenciar a VOA: “En el mundo en general, el vacío dejado por los demandados al desconectar las redes de noticias de USAGM está siendo llenado por propagandistas cuyos mensajes monopolizarán las ondas globales, mientras que VOA, Radio y Televisión Martí, RFE/RL, RFA, Medios de Comunicación del Oriente Medio, y otros —voces creíbles en contra— son silenciados.” Mientras tanto, RFE/RL afirmó su compromiso con su misión y la búsqueda legal de fondos apropiados, declarando: “El compromiso de RFE/RL con nuestras audiencias y nuestra misión mandatada por el Congreso permanece firme. Esperamos recibir los fondos que el Congreso nos ha asignado a través de la Agencia de Medios Globales de los EE. UU. (USAGM). Hasta entonces, perseguiremos todos los recursos legales necesarios para asegurar que la intención del Congreso sea respetada.”