El verano de 2024 fue testigo de interesantes, aunque finalmente infructuosas, conversaciones de fusión entre los gigantes de los medios John Malone y Rupert Murdoch. Malone, presidente emérito de Warner Bros. Discovery, confirmó al Financial Times “conversaciones serias” con Murdoch sobre la fusión de Fox Corporation y WBDiscovery. Si bien el “impulso a la fusión” de Malone es bien conocido, esta unión potencial tenía un peso significativo, prometiendo un gigante mediático que abarcaría los activos de entretenimiento de Warner (HBO, CNN) y el poder de transmisión y deportes de Fox.

El CEO de Warner, David Zaslav, y el presidente de News Corp, Lachlan Murdoch, participaron según los informes. Una fusión exitosa habría creado un alcance sin precedentes en noticias, deportes y entretenimiento. Sin embargo, los obstáculos filosóficos y operativos resultaron insuperables. Malone reconoció que el fracaso del acuerdo se debió a la incompatibilidad de Fox News y CNN: la fusión “probablemente habría ocurrido si hubiéramos pensado que Fox News y CNN podrían coexistir bajo un mismo paraguas”.

El choque fundamental entre las identidades editoriales de las cadenas presentó un obstáculo significativo. El riesgo de alienar a los espectadores, empleados y reguladores se consideró demasiado alto. Más allá de las divisiones de noticias, existían posibles sinergias en la transmisión de deportes, con la fortaleza de Fox potencialmente reforzando la cartera de Warner. Fox Broadcasting, independientemente de su división de noticias, también se consideraba un activo valioso. Las conversaciones también reflejaron el legado de Malone y Murdoch, ambos cerca del final de sus carreras, con los planes filantrópicos de Malone. En última instancia, la división cultural resultó insuperable, dejando la fusión como un convincente escenario de “qué pasaría si”. Si bien la estrategia tenía mérito, las profundas diferencias culturales impidieron finalmente que el acuerdo llegara a buen término.