Japón ha lanzado con éxito la primera de su nueva generación de naves espaciales de carga, la HTV-X1, destinada a la Estación Espacial Internacional (ISS). El lanzamiento se produjo en un cohete H3 desde el Centro Espacial de Tanegashima a las 8 p.m., hora del Este, el 25 de octubre, tras aplazamientos relacionados con el clima. Esto marcó el vuelo inaugural de la variante H3-24W del cohete H3, equipado con motores gemelos de primera etapa, cuatro propulsores de cohetes sólidos y un carenado de carga útil ampliado.
Aproximadamente 14 minutos después del despegue, la HTV-X1 se separó de la etapa superior del cohete y sus paneles solares se desplegaron en 10 minutos. La HTV-X representa una iteración mejorada del vehículo de carga HTV, utilizado anteriormente por la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) para el transporte de carga a la ISS entre 2009 y 2020. Con un peso de 16 toneladas a plena capacidad, la nueva nave espacial puede transportar aproximadamente seis toneladas métricas de carga, un aumento del 50% en comparación con su predecesora. Esto incluye cuatro toneladas de carga presurizada y dos toneladas de carga no presurizada.
La HTV-X incorpora varios avances de diseño, presentando un módulo presurizado con un volumen un 60% mayor que el original. Emplea paneles solares desplegables, proporcionando un 50% más de energía en comparación con los paneles montados en el cuerpo de la HTV anterior. La carga no presurizada ahora se coloca en la parte superior de la nave espacial, lo que mejora la capacidad general. La HTV-X1 transporta alrededor de 4.5 toneladas de carga, incluyendo hardware de la estación espacial, experimentos y suministros. Esto incluye seis cubesats programados para ser desplegados desde la esclusa de aire del módulo Kibo.
La llegada prevista de la HTV-X1 a la ISS es el 29 de octubre, donde se acoplará al módulo Harmony de la estación utilizando el brazo robótico Canadarm2. La nave espacial está diseñada para permanecer en la ISS hasta por seis meses, aunque los funcionarios de JAXA mencionaron en una sesión informativa del 19 de octubre que la duración exacta de su estancia no se había determinado. Después de salir de la estación, la HTV-X1 se someterá a demostraciones de tecnología en la órbita terrestre baja durante aproximadamente tres meses. Estas pruebas incluirán la liberación de un cubesat, la evaluación de un retrorreflector láser en la nave espacial y el despliegue de una estructura con una antena de panel plano y células solares para evaluar las tecnologías para futuros sistemas de energía solar basados en el espacio.
Antes de su eventual reentrada y combustión sobre el Océano Pacífico Sur, la HTV-X se llenará con material de desecho de la ISS. Actualmente, hay al menos tres misiones HTV-X planificadas a la ISS. JAXA también ha propuesto una modificación de la nave espacial para transportar carga al Gateway lunar.

