Raven Space Systems, una startup de fabricación aditiva con sede en Kansas City, Misuri, ha alcanzado hitos significativos al obtener contratos con la NASA y el Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea de EE. UU., División de Propulsión de Cohetes. Estos acuerdos, junto con contratos adicionales de la Fuerza Aérea y la Fundación Nacional de Ciencias, suman más de 4 millones de dólares. El proceso patentado de deposición asistida por microondas (MAD) de la empresa es el núcleo de estos proyectos, permitiendo avances en el desarrollo de productos aeroespaciales y de defensa.
“Nuestra misión es transformar la forma en que fabricamos materiales compuestos”, declaró Black Herren, CEO y cofundador de Raven. “Básicamente, podemos desbloquear la impresión basada en deposición escalable de termoestables comerciales, cerámicas y materiales compuestos por primera vez al endurecer los materiales, mientras imprimimos, usando microondas”. Un ejemplo principal de su trabajo implica el desarrollo de aeroshells impresos en 3D para pruebas de vuelo hipersónico, un proyecto financiado por un contrato AFRL Small Business Technology Transfer de 1,8 millones de dólares.
El proceso MAD de Raven utiliza impresión de escritura directa de tinta (DIW), descrita por Herren como “la tecnología de impresión 3D más versátil de la que nadie ha oído hablar”. Añadió: “La DIW ha estado estancada en el laboratorio, haciendo muestras pequeñas, durante un par de décadas. Podemos imprimir cosas grandes por primera vez utilizando las microondas en nuestro proceso”. El enfoque inicial de la empresa es la producción de toberas de motores de cohetes sólidos y sistemas de protección térmica. Herren señaló: “Muchas empresas imprimen en 3D cajas y combustible de motores de cohetes sólidos, pero nadie hace toberas y aislamiento. Ahí es donde hemos identificado un punto de apoyo”.
La colaboración con expertos del Centro de Vuelo Espacial Marshall de la NASA y la División de Propulsión de Cohetes del AFRL, ambos a través de Acuerdos de Investigación y Desarrollo Cooperativos, será crucial para probar y caracterizar las piezas impresas de motores de cohetes sólidos. “Nos centramos en desarrollar la línea de producción más eficiente integrando todos los procesos, desde las materias primas hasta las piezas de uso final”, enfatizó Herren. Tras la construcción de prototipos de impresoras, Raven planea comenzar las ventas de piezas este año, aprovechando una impresora a escala industrial con un volumen de construcción de un metro cúbico. La empresa obtuvo recientemente 2 millones de dólares en financiación pre semilla, liderada por Backswing Ventures, con la participación de 46 Venture Capital, Mana Ventures, What If Ventures y Cape Fear Ventures.
De cara al futuro, Herren prevé aplicar el proceso MAD a una gama más amplia de aplicaciones, afirmando que podría utilizarse para “prácticamente todos los componentes de los motores de cohetes sólidos”, así como para satélites, drones autónomos y aviones desechables.