La administración Trump ha emitido una directiva al Pentágono, exigiendo una reducción presupuestaria anual del 8% durante los próximos cinco años. Este recorte significativo, que afecta aproximadamente a $50 mil millones de la propuesta de presupuesto del año fiscal 2026 elaborada inicialmente por la administración Biden, fue anunciado en una declaración del 19 de febrero por Robert Salesses, Secretario Adjunto de Defensa en funciones.

En un memorando con fecha del 18 de febrero, todas las ramas militares y agencias de defensa civiles recibieron órdenes de presentar propuestas de presupuesto revisadas antes del 24 de febrero, reflejando estas reducciones obligatorias. “El mandato del Presidente Trump al Departamento es claro: lograr la paz a través de la fuerza. Lo haremos presentando presupuestos que revivan el espíritu guerrero, reconstruyan nuestro ejército y restablezcan la disuasión”, declaró Salesses.

Ciertos programas clave permanecerán intactos por estos recortes. Estos incluyen la seguridad fronteriza y la recientemente propuesta iniciativa de defensa antimisiles Iron Dome para Estados Unidos, un proyecto detallado en una orden ejecutiva del 27 de enero. Esta iniciativa tiene como objetivo establecer una defensa integral contra amenazas avanzadas, incluidos misiles hipersónicos y balísticos, y se basa en gran medida en activos espaciales. No se han publicado estimaciones de costos para el programa Iron Dome.

El Secretario de Defensa Pete Hegseth ha iniciado un proceso de revisión para determinar qué programas estarán sujetos a recortes de la propuesta de presupuesto del año fiscal 2026 de la administración Biden. Según Salesses, esta revisión se dirigirá principalmente a “programas heredados de Biden de bajo impacto y baja prioridad”. Los fondos ahorrados a través de estas reducciones se reasignarán a programas alineados con las prioridades de la administración Trump.

La administración ha indicado que los programas relacionados con el cambio climático y lo que denomina “burocracia excesiva” probablemente enfrentarán los primeros y más sustanciales recortes. Se prevé que la propuesta de presupuesto final del Pentágono, que incorpora estas directivas, se presente al Congreso en los próximos meses, lo que provocará un debate seguro que será contencioso sobre las prioridades de defensa nacional.