El Presidente Trump ha nominado oficialmente al Gen. Michael Guetlein de la Fuerza Espacial para gestionar el sistema de defensa antimisiles “Golden Dome for America”. Esta nominación eleva a Guetlein de su puesto como vicejefe de operaciones espaciales para liderar lo que Trump llama una prioridad máxima de seguridad nacional. Trump elogió la experiencia de Guetlein en la gestión de programas complejos y la integración de tecnologías espaciales en la defensa nacional.
Golden Dome, basado en el Iron Dome de Israel, dependerá en gran medida de activos espaciales para detectar y neutralizar amenazas de misiles. Trump estima su costo en 175 mil millones de dólares. Guetlein ha comparado la escala del proyecto con el Proyecto Manhattan. Se enfrenta al desafío de coordinar varias agencias gubernamentales, ramas militares y empresas privadas, mientras navega por las restricciones presupuestarias y las prioridades políticas.
El proyecto ha generado controversia en el Congreso. Los legisladores de ambos partidos expresan frustración por la falta de información sobre sus detalles específicos. Se han planteado preocupaciones sobre la aprobación de miles de millones de dólares para un programa que carece de una arquitectura y detalles operativos definidos. Más allá de las preocupaciones presupuestarias, expertos y legisladores advierten que Golden Dome podría desestabilizar la seguridad global y desencadenar una carrera armamentística debido a su enfoque en disuadir a adversarios como Rusia y China.
Golden Dome también enfrenta importantes obstáculos tecnológicos. La interceptación de misiles hipersónicos presenta un gran desafío. Se necesitan nuevas tecnologías de sensores e interceptores para abordar la velocidad y la maniobrabilidad de estas armas. La iniciativa prevé un vasto “sistema de sistemas” que integra tecnologías terrestres, marítimas, aéreas y espaciales para una defensa antimisiles integral en todo Estados Unidos.